2 de febrero de 2010

EFECTO SORPRESA

Nada como un golpe de casualidad. Como todos los mediodías, antes de una siesta, anclé en el inodoro. Una Vida De Charly García de Sergio Marchi embellece ese momento. Mucho Charly le hubiera puesto yo. Por momentos hasta te agobia desde el libro, esa vorágine, ese escándalo, eso que no queremos ver, el lado oscuro de la luna de Charly y tantos más.
Antes de la siesta, revuelvo cds, hasta encontrar La Hija de La Lágrima. Suena Victima. Después me duermo. Me despierto en La Sal No Sala, apago porque me estaba taladrando el cerebro.
Despierto, algo tarde, salgo corriendo, apurado, acalorado, alunado con temas de Charly en la cabeza. Llego al trabajo y de la nada empiezo a cantar Transformación, un tema de Seru que conocí en Kill Gill. Estaría bueno seguir escuchando a Charly –digo-. Pongo la radio “y en coordinación perfecta, como una aguja en un pajar” diría Calamaro, suena Transformación en la radio.
Hablamos de la famosa “Maravillisación”.



Transformación:

Aislando las cabinas procesamos el dolor.
Cerrando las cortinas mantenemos la ilusión.
Y cada vez que el canillita trae noticias del final
parece asegurar que sólo por amor
nadie vende diarios.

Y cada vez que pedimos perdón teniendo la razón
por descomposición tratando de agradar
nos hacemos daño.

Algunas veces estoy encerrado
la jaula no es tan solo esta pared.
cuando quiero salir, no me importa morir
no tengo fin!
no tengo fin!

No insistan en ponerme cerraduras
soy libre y no puedo desistir
ni digas que estoy mal, yo la estoy pasando bien
no se por qué
no se por qué.

Cada vez que trates de matar
quizás estés matando a quien te trata bien
cada vez que quieras disfrazar
todos esos disfraces abrirán tu piel.

Y cuando estés cansado de sangrar
ese vacío ya no te hará mal
cada vez que trates de vencer
será que tienes mucho que perder.

Volveré a abrir tu corazón
aunque pasen mil años te daré mi amor
volveré a abrir tu corazón
aunque me desintegre la transformación.
Y cuando estés cansado de llorar
verás que ya no hay nada que cerrar.
Volveré a abrir tu corazón.

1 comentario:

Facundo dijo...

que hermoza canción.
Esta muy bueno este blog la verdad me gusta mucho, pero me interesaría saber quien es el autor de tal. gracias

Spinetta por Aznar

Hoy todas las guitarras están de luto
La mía, que tendría que haberse puesto a repasar zambas
sólo puede pensar en la tuya,
tal vez porque el barro
tal vez porque este balcón donde te vi
casi por última vez
mira una nube de la forma y el color
de esas eléctricas con las que soñábamos de chicos
Este balcón que se quedó esperando una charla
unas palabras o un abrazo
más
que yá no llegará
Luto también en las palabras
habituadas como estaban a que les pusieras
cascabeles
guirnaldas asonantes
o ruedas de tren apocalíptico
caleidoscópicos ojos de fertil papel
de tu prolífica pluma
que suma y resta sílabas
del metro patrón de las esferas
apenas solas
a solas penas
Adiós
que sea A-Dios
a sus brazos
a ese rincón de magia
que seguramente Él guardará
para los que se animan a jugar
con los bloques con los que ha construido el mundo
haciendo pequeños nuevos mundos de cuatro minutos
donde el corazón se muestra
y baila desafiando al vacio
Adiós
Mientras me duele el pecho
te imagino en viaje
por inmensidades más vastas que las del Capitán
pero a diferencia de él
sé que tendrás todos los tangos silbados al oído
y nunca faltará un mate
ni perfume a malvones
En todos nosotros se queda un pedacito tuyo
serás inspiración multiplicada por millares
a lo largo de los años
y lo ancho de las geografías
Cambiaste nuestras vidas
abriendole camino a la imaginación
cantándole salvaje o dulcemente
a los misterios que nos habitan
al misterio que somos
Adiós
No me resigno a tener que decirlo
Adiós
mensajero del infinito

Pedro Aznar