“Es importante que Cristina sea reelegida para establecer el cambio que pide el país”

El rosarino se encuentra atravesando un 2011 de alta intensidad, en el que despedirá “Confiá”, lanzará un CD con canciones del mundo donde solamente cantará y rodará su tercer largometraje.

“Es bueno que Cristina se establezca para encarnar una apuesta inevitable que implica el fin de una época. Es algo que me encanta porque veo a estos dinosaurios asustados y acorralados por las circunstancias de la libertad”, analizó Páez en una entrevista con Télam.

Sentado en el amplio living de su departamento del barrio porteño de la zona de Recoleta, el artista rosarino consignó que “estamos viviendo el fin de una época porque ya no se tolera que aparezca una diva diciendo que hay que salir a matar a un ladrón.

Eso es insostenible, ya no se aguanta más”.

“¡Cómo querríamos -indicó- tener a (Lucio) Mansilla, a (Jorge Luis) Borges, a (Adolfo) Bioy (Casares), a (Leopoldo) Lugones sentados en la mesa de discusión. A lo mejor de la derecha discutiendo y no a estos palurdos que escriben en los diarios y salen por televisión!”.

Para cerrar esa visión que va de la política a la música, puntualizó que “me imagino a la derecha ilustre revolcándose en las tumbas viendo quiénes la representan ahora. Los inservibles se quedan afuera, la historia -nomás- los momifica porque son pesados, antiguos, dificultosos y Charly (García) fue el que profetizó que los dinosaurios iban a desaparecer”.

Enfático para proclamar que “aplaudo, celebro y acompaño esta cirugía mayor que era inimaginable en la Argentina de los 90”, Fito asume esta toma de posición con una febril actividad artística que de aquí a octubre comenzará a expresarse a partir del sábado 30 del corriente cuando despida su más reciente álbum “Confiá” con un concierto al aire libre en el estadio porteño de GEBA.

“Puede que el 30 haga frío pero con que no llueva está bien porque el calor lo vamos a poner nosotros”, prometió Fito en relación al show que cerrará un intenso año compartido con su energética banda en torno a sus más nuevas canciones.

El músico, que supo acompañar a Baglietto y a García para emprender desde mediados de los 80 un camino en solitario que le ha hecho ganar amplio reconocimiento en toda iberoamérica, comentó que “vamos a cerrar este trabajo porque a mí me gusta hacer un cierre de las cosas, pero en sí no cambia nada porque la banda se mantiene igual”.

En ese sentido, y al analizar el conjunto para el que convocó a los tecladistas Diego Olivero y Juan Absatz, al baterista Gastón Baremberg, al bajista Eloy Quintana y a los guitarristas Coki Debernardi, Carlos Vandera y Dizzy Espeche, señaló que “tengo músicos dúctiles que tienen recursos técnicos y, aparte, le meten mucha garra”.

“No es sencillo -advirtió- encontrar laderos porque un grupo es, literalmente, una familia. Hay vínculos, todas las decisiones que se toman son importantes y se precisa encontrar gente con la que vivir mucho tiempo”.

Feliz por la química alcanzada, añadió que “me hubiera gustado y ojalá lo pueda lograr con esta banda, alcanzar el vínculo que tienen los Decadentes, los Titás o los Café Tacuba, aunque yo no soy un demócrata ni mucho menos, pero los años me han dado aplomo para salirme un poco de mi propia voz y prestar atención a otras cosas”.

Aunque desde mediados de mayo girará a solo piano por Mallorca, Zaragoza, Bilbao, Pamplona, Londres, Leganés, París y Tel Aviv, luego -junto al septeto- se presentará en Perú, Colombia y Venezuela.

Esos músicos también serán parte en vivo del nuevo y ambicioso proyecto discográfico de Páez, que bajo la batuta del pianista y arreglador Leo Sujatovich, llevaría por título “Canciones para Aliens”.

“Esta es una tarea que quiero hacer de acá hasta que me muera cada dos años porque sirve para descomprimir. Se trata de hacer músicas populares de todos los lugares del mundo empezando por las que me gustan”, describió.

El repertorio inicial reunirá, entre otros títulos, "Sign o` the Times", de Prince; “Manuelita”, de María Elena Walsh; “El breve espacio en que no estás”, de Pablo Milanés; “Construcción”, de Chico Buarque; “Fiesta”, de Joan Manuel Serrat; “Cuando ya me empiece a quedar solo”, de Charly García; “Te recuerdo Amanda”, de Víctor Jara; “Somebody to Love”, de Queen y “Tango”, del japonés Ryuichi Sakamoto.

“La selección -reveló- tiene que ver con qué le mandaría a un Alien para mostrarle que acá se cocinó esto y se fue armando una idea compleja porque todas estas parecieran canciones como de otro mundo que no cotizan en el mercado porque son invaluables”.

Para encarar semejante cancionero donde también aparecerán Los Beatles, los franceses Jacques Brel y Serge Gainsbourg y hasta alguna canzonetta italiana, el pianista se dedicará, por primera vez en su dilatado camino, únicamente a cantar porque, fundamentó, “Leo es un músico tan vasto y con tantos recursos que me hace sentir muy seguro porque no tiene miedos”.

Con esa placa prevista para octubre, en el horizonte del creador hay lugar para más: una novela que está escribiendo apasionadamente desde 2010 y la preparación de su tercer filme a partir de un viejo proyecto titulado “Novela” que ya busca locaciones en Salta y en Santa Fe.