9 de diciembre de 2009

fito páez dice haber moderado su pasión juvenil por la revolución cubana



LA HABANA (AFP) - El músico argentino Fito Páez admitió el martes en La Habana que en su juventud pudo ser un apasionado de la revolución cubana, pero que, a sus 46 años, el tiempo "atempera los fuegos pasionales" y ahora ve como lo más importante "el respeto por la vida humana".
 "El tiempo lo que hace es atemperar los fuegos pasionales y poner las cosas en su lugar (...), la vida en su lugar (...) Lo más importante es el respeto por la vida humana, estés en el sistema que estés, y vivas donde vivas, ahí se dirige toda mi atención", dijo Páez a la prensa.
"Todos los países tienen procesos que son muy específicos, muy complejos y donde están en juego un montón de cosas", opinó Páez. "No es algo del socialismo y el neoliberalismo, ni mucho menos, sino de algo que tiene ver con la condición humana".
Páez participa por cuarta vez en el Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano, que en esta 31 edición presentará fuera de competición el documental 'Las manos sobre el piano', del argentino Fernando Rubio, sobre su obra musical.
Fito Páez descartó presentarse en público durante su visita a la isla: solo encuentros de amigos con un piano, que prefiere a los grandes conciertos. "Siempre voy a anteponer (...) el encuentro en una casa con un piano entre músicos", dijo el músico, que respondió con humor en la rueda de prensa.
Sobre la posibilidad de hacer alguna película sobre Ernesto Che Guevara, dijo que se trata de "una figura monumental" sobre la cual se han hecho grandes obras épicas.
"Yo tiendo a pensar más en la intimidad de la casa... No sé si puedo pensar tan heroicamente, tan épicamente a la hora de narrar o decir con palabras, a lo mejor no están en mi naturaleza estas narraciones épicas", aseguró el músico, también guionista y director de los largometrajes 'Vidas Privadas' (2001) y '¿De quién es el portaligas?' (2007).

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Spinetta por Aznar

Hoy todas las guitarras están de luto
La mía, que tendría que haberse puesto a repasar zambas
sólo puede pensar en la tuya,
tal vez porque el barro
tal vez porque este balcón donde te vi
casi por última vez
mira una nube de la forma y el color
de esas eléctricas con las que soñábamos de chicos
Este balcón que se quedó esperando una charla
unas palabras o un abrazo
más
que yá no llegará
Luto también en las palabras
habituadas como estaban a que les pusieras
cascabeles
guirnaldas asonantes
o ruedas de tren apocalíptico
caleidoscópicos ojos de fertil papel
de tu prolífica pluma
que suma y resta sílabas
del metro patrón de las esferas
apenas solas
a solas penas
Adiós
que sea A-Dios
a sus brazos
a ese rincón de magia
que seguramente Él guardará
para los que se animan a jugar
con los bloques con los que ha construido el mundo
haciendo pequeños nuevos mundos de cuatro minutos
donde el corazón se muestra
y baila desafiando al vacio
Adiós
Mientras me duele el pecho
te imagino en viaje
por inmensidades más vastas que las del Capitán
pero a diferencia de él
sé que tendrás todos los tangos silbados al oído
y nunca faltará un mate
ni perfume a malvones
En todos nosotros se queda un pedacito tuyo
serás inspiración multiplicada por millares
a lo largo de los años
y lo ancho de las geografías
Cambiaste nuestras vidas
abriendole camino a la imaginación
cantándole salvaje o dulcemente
a los misterios que nos habitan
al misterio que somos
Adiós
No me resigno a tener que decirlo
Adiós
mensajero del infinito

Pedro Aznar