13 de noviembre de 2009

spinetta tocó con todos


Esto fue todo. Más, el 4 de diciembre." Y resulta que todo fue ni más ni menos que Invisible y Pescado Rabioso en el mismo escenario. Y fueron Luis Alberto Spinetta y Charly García cantando Rezo por vos. Y fueron aquellos viejos buenos tiempos resumidos en un par de canciones, como breve anticipo de lo que será el concierto de las Bandas Eternas del Flaco, en Vélez.
Spinetta está contento, y se le nota. Se abraza a Rodolfo García, Emilio del Guercio y Edelmiro Molinari, y habla de "la entrega total de los músicos". Y confiesa que cuando surgió la idea de recorrer en una noche sus 40 años de historia con la música titubeó. "Pero cuando me di cuenta del amor que nos guiaba reaccioné y decidí hacerlo", dice.El bar de San Telmo parece una convención del rock nacional. A un costado del escenario, David Lebón, Black Amaya, Leo Sujatovich, Machi, Pomo. Más acá, Bocón Frascino, Juan del Barrio, Marcelo Torres. Y hay más.

Almendra, Pescado, Invisible, Jade, Los socios del desierto. Bandas eternas que dejaron impresas en la memoria una lista interminable de canciones que marcaron a fuego a varias generaciones.
"Empezamos con 70 temas, que Luis me pasó para que los pase a guitarra y pueda, de ahí, sacar los que van al repertorio del concierto", cuenta Guillermo Vadalá, el "salvatore", que, sin pensarlo, será en la misma noche bajista de Pescado y guitarrista de Jade.Amor de primavera, con Pomo y Machi, Mañana o pasado y Me gusta ese tajo, con Carlos Cutaia, Lebón, Frascino y Amaya. Retoño, con su banda actual, y la tragedia de los chicos del colegio Ecos presente, como un estigma. Como una deuda. Eterna. "No, los temas que vamos a hacer no te los voy a decir", se ríe Machi. En cambio, sí cuenta que cuando algunos amigos le preguntaban si era cierto que el trío volvería a sonar en un escenario creía que era una locura. "Pero un día me llamó Luis Alberto y me di cuenta de que iba en serio. Y en el tiempo que estamos compartiendo me di cuenta de que la magia sigue estando, y de que la música que hicimos es buenísima", dice.Y Sujatovich asiente. "Luis Spinetta conserva en mi vida una vigencia total. Y este reencuentro es una felicidad muy grande. Luis está en un momento maravilloso de su vida, y compartirlo con él, y con mi familia es fantástico", señala. "Ahora sí", dice el Flaco, y encara la salida. Y entonces sí eso fue todo. Pero por suerte, en 20 días habrá más. Mucho más

FUENTE: CLARIN

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Es perfecto ese recital. Daría media vida por estar ahí y escucharlo. Vayan los que puedan, será inolvidable. Spinetta es un ángel poeta.
HM

Anónimo dijo...

Luis Alberto, te quiero!

Spinetta por Aznar

Hoy todas las guitarras están de luto
La mía, que tendría que haberse puesto a repasar zambas
sólo puede pensar en la tuya,
tal vez porque el barro
tal vez porque este balcón donde te vi
casi por última vez
mira una nube de la forma y el color
de esas eléctricas con las que soñábamos de chicos
Este balcón que se quedó esperando una charla
unas palabras o un abrazo
más
que yá no llegará
Luto también en las palabras
habituadas como estaban a que les pusieras
cascabeles
guirnaldas asonantes
o ruedas de tren apocalíptico
caleidoscópicos ojos de fertil papel
de tu prolífica pluma
que suma y resta sílabas
del metro patrón de las esferas
apenas solas
a solas penas
Adiós
que sea A-Dios
a sus brazos
a ese rincón de magia
que seguramente Él guardará
para los que se animan a jugar
con los bloques con los que ha construido el mundo
haciendo pequeños nuevos mundos de cuatro minutos
donde el corazón se muestra
y baila desafiando al vacio
Adiós
Mientras me duele el pecho
te imagino en viaje
por inmensidades más vastas que las del Capitán
pero a diferencia de él
sé que tendrás todos los tangos silbados al oído
y nunca faltará un mate
ni perfume a malvones
En todos nosotros se queda un pedacito tuyo
serás inspiración multiplicada por millares
a lo largo de los años
y lo ancho de las geografías
Cambiaste nuestras vidas
abriendole camino a la imaginación
cantándole salvaje o dulcemente
a los misterios que nos habitan
al misterio que somos
Adiós
No me resigno a tener que decirlo
Adiós
mensajero del infinito

Pedro Aznar